El dibujo y la pintura fueron asignaturas pendientes en la vida de Ana Lucía Spinelli. Desde pequeña se sintió atraída por los colores, con los cuales jugó con lápices y acuarelas vertiéndolos en distintas figuras. La vida, con sus obligaciones y responsabilidades, determinaron que decidiera postergar su vocación. Con una hermosa familia formada con hijos y nietos, hace dos años comenzó a perfeccionar sus aspiraciones de niña participando del taller de la profesora Liliana Cánepa. Es allí donde comparte con “Nani” Flores el placer de esta expresión artística.
En el taller las alumnas, devenidas en expositoras, eligen los temas y logran expresarse naturalmente adquiriendo conocimientos que hacen al perfeccionamiento de su técnica. Todo en un clima agradable, cordial y de compañerismo, característica de los grupos que organiza la docente.
Spinelli y Flores han realizado otras exposiciones en el SCUM (Salón Cultural de Usos Múltiples), Sala Frey y en el salón del Ex Correo, actualmente Sala de Informes Turísticos del Centro Cívico.
“El dibujo y la pintura, como todas las demás manifestaciones del ser humano son formas de comunicación y expresiones emocionales y espirituales. Así las concibo y las aplico. Aspiro a que mis realizaciones gusten”, concluyó una de las expositoras.
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